Los baleros son unos anillos que deben estar bien engrasados para que funcionen correctamente, así que debes darles mantenimiento. No cambiarlos cuando existe demasiada fricción puede hacer que las llantas se desgasten más rápido y de manera innecesaria, incluso pueden bloquear la llanta y provocar un accidente.

Gracias a que los baleros permiten que las llantas vayan sobre un eje con poca fricción, el sonido que hacen al rozar más de lo usual permite saber cuándo no funcionan adecuadamente. El sonido vendrá de las llantas y aumentará conforme vayas más rápido.

Si escuchas ruido, es buena idea comprobar los baleros para encontrar aquel que necesita. De ser posible, usa un gato hidráulico para girar cada rueda con suficiente velocidad para que se escuche el balero dañado.

Recuerda que para evitar accidentes es necesario contar con piezas de calidad y marcas reconocidas. En Refacciones Guerrero manejamos un amplio catálogo con refacciones de alta calidad para garantizar su confiabilidad.

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